viernes, 7 de noviembre de 2008

Dios satisface nuestras necesidades

Si, es raro escribir sobre esto, aunque en reiteradas ocasiones nos los dicen en nuestras iglesias con frases como "¡deben confiarle a Dios sus necesidades" pero en la práctica, todo lo que obtenemos es por el fruto de nuestro trabajo, ...si es cierto, Dios nos dá la vida y el trabajo, y por ellos agradezco cada día de mi vida, el aire no lo pago, mi mejor proveedor es Dios. Pero las cosas que obtenemos diariamente como la comida, el shampoo y otras cosas debemos comprarlas a nuestros queridos almaceneros y/o a nuestros frios y gigantes hipermercados, pero ayer en la noche ocurrio un suceso muy extraño y sorprendente.

Mi querida madre me ha estado comunicando esta semana su deseo de comprarme una nuevas e inoloras zapatillas, las cuales hasta antes de ayer nunca compro, ademas yo tampoco me preocupe tanto, ya que me cuesta mucho dejar un par de zapatillas botada (maña mía). pero ayer en la noche, llego a la casa de mi polola, y ella me dice: "mi hermana se encontro una caja con zapatillas nuevas número 41... tu calzas 41 así que pruebatelas".

A primera vista me gustaron, y yo si que soy regodion con las zapatillas, me las probe, y me quedaron espectaculares, y yo le dije, ya genial me quedan excelentes, y mi amada polola me dice: "Son tuyas"... JAJAJA... me rio.

Luego pienso, Dios me ama tanto, para darme zapatillas gratis, de mi gusto, y sin buscarlo.

Dios satisface nuestras necesidades, aunque no la merezcamos o simplemente no la busquemos. Dios es asi, un poco omnipotente.